A partir de allí, se desplegará todo un itinerario de hipótesis y declaraciones en un permanente cruce de testigos que se contradicen y confunden.
Lo más importante es que el eje de la trama no está puesto sólo en lo que ellos dicen, sino en el entramado de objetos e imágenes que se cruzan permanentemente construyendo distintas versiones de lo sucedido.
La estructura de la obra es similar al montaje cinematográfico. La dinámica se apoya fundamentalmente en la iluminación y los diferentes dispositivos lumínicos.
La música en vivo es ejecutada por un dúo de cámara y funciona como banda sonora del espectáculo.
Inspirado en las teorías literarias del controvertido Robbe Grillet, la propuesta de esta obra plantea un espectador activo, que es interpelado por la obra a tomar una posición y a definir el recorrido del relato.
La combinación de la música, la iluminación y los objetos en movimiento, es el mecanismo principal que permite crear los diferentes climas del espectáculo y desarrollar esta singular historia.
Este espectáculo se concreta luego de 3 años y medio de investigación escénica donde se reunieron actores, músicos, cineastas y escenógrafos. Paralelamente a ello, se desarrolló también una investigación teórico-práctica donde se refleja las bases para la concepción de su dramaturgia, reuniendo procedimientos provenientes del mundo del objeto, del cine y de la literatura. Dicho trabajo será publicado este año por el Instituto Nacional del Teatro.